LAS
OPCIONES BÁSICAS DEL MOVIMIENTO SCOUT CATÓLICO
Revista KRAAL SCOUT
nº 7 invierno 91-92
Desde sus orígenes,
el Movimiento Scout se definió como un “movimiento educativo”, definición
que sigue hoy vigente y que es inherente al propio Movimiento Scout.
El Movimiento Scout
Católico, también se define como un movimiento educativo: “... movimiento de
educación integral que se propone formas hombres y mujeres libres, críticos, comprometidos
con su fe y en el momento histórico que les ha tocado vivir, abiertos a los
demás, capaces de amar y de vivir en grupo”. (Carta del M.S.C. 1980)
Esta definición de “educación
integral” es propia del M.S.C. y propia del Movimiento Scout en general, y no
debe confundirse con las “opciones básicas”, como de hecho se ha estado
haciendo desde hace algunos años.
No sé bien porqué,
desde hace varios años se habla de la “opción educativa” del M.S.C., opción que
no viene formulada en ninguno de los documentos claves que definen nuestro MOVIMIENTO
SCOUT CATÓLICO. Vuelvo a repetir: la educación es inherente al Movimiento Scout.
Las opciones básicas
son, como bien dice el “Reglamento, normas y terminología del M.S.C.” en su
página 33, las ”claves de indentidad elegidas por M.S.C.”, y continúa diciendo
“Son la educación en la fe y en el país a través del método scout”. ¿No se nos
olvida algo?
Desde aquí quiero
plantear lo siguiente: si las opciones básicas son las claves de identidad del
M.S.C., ¿por qué las utilizamos de cualquier forma? ¿por qué las formulamos
como se nos antoja? ¿no existe una formulación precisa?.
Me parece que la
identidad de un Movimiento como el nuestro no puede difuminarse y variarse cuando
a alguien se le antoja. Nuestra razón de ser son las opciones básicas y éstas están
claramente definidas en aquella pequeña publicación que apareció en 1975
titulada “El Método M.S.C.”
Así, las opciones
básicas del M.S.C., nuestros pilares, quedaron formulados de la siguiente forma:
- · Educación en la Fe.
- · Educación en el país.
- · Educación activa hacia la responsabilidad.
recogiendo de forma
clara cuál es nuestra identidad.
En primer lugar, la educación
en la Fe. Somos movimiento de Iglesia, y con ella debe estar nuestro mayor
compromiso. Evangelizar es nuestra “palabra clave”: “... id por todo el mundo y
predicad el Evangelio”.
En segundo lugar, la educación
en el país. Porque nos movemos en un entorno concreto, vivimos en una
sociedad con sus fallos y sus aciertos, y no podemos dejarla de lado. Vivimos en
una realidad concreta, y en esa realidad tenemos que educar.
En tercer lugar, la educación
activa hacia la responsabilidad. Educación activa, en movimiento, aprender
haciendo, (es propio del Escultismo); pero para formar ciudadanos responsables,
comprometidos, con un estilo de vida propio.
Estas opciones no
tienen un orden establecido. Se formularon en el orden que las he reseñado, pero
se encuentran íntimamente ligadas, conectadas unas con otras, formando una sola
cosa. No podemos descuidar ninguna de ellas.
Siempre se resumieron las opciones en tres palabras: FE - PAÍS -
RESPONSABILIDAD, por qué resumirlas ahora en tres palabras distintas: EDUCACIÓN - FE -
PAÍS. ¿Queremos perder nuestra identidad?
Desde aquí quiero
hacer una llamada a la reflexión. Una reflexión a todos los niveles del M.S.C.
¿Siguen vigentes nuestras tres opciones básicas? ¿Queremos formar hombres y mujeres
libres, responsables, comprometidos con su fe y en una realidad propia, de
forma activa? ¿Queremos hacer hombres y mujeres “educativos”?
¿No están vigentes
nuestras opciones de “fe-país-responsabilidad”? ¿Es que nuestro M.S.C. ha
cambiado sus planteamientos educativos? ¿Es que somos conformistas y admitimos
todo lo que nos echen? ¿No somos capaces de mantener nuestra identidad?
Inventemos un
Escultismo nuevo, adaptado a las circunstancias de tiempo y lugar y a la evolución
de la vida, pero no perdamos el Norte, no perdamos nuestra identidad.
Potenciemos nuestras
opciones básicas. Hagamos que se conozcan tal como son. No las cambiemos a
nuestro gusto. ¿Cuesta trabajo enunciarlas tal como son? Repito:
- Educación en la fe.
- Educación en el
país.
- Educación activa
hacia la responsabilidad.
Juan Ortega Álvaro
Director de la
Escuela de Formación del Movimiento Scout Católico de Andalucía
También se publicó en SCOUTSUR.