Desde hace varios años, la Asociación de Antiguos Scouts y Guías de la provincia de Cádiz, de la que soy secretario, viene realizando una actividad enmarcada en el 1 de agosto, fecha en que comienza el primer campamento scout en la isla de Brownsea en 1907. Se han cumplido 110 años de aquel campamento y el Espíritu Scout sigue vivo.
En 2007 con motivo del centenario del Escultismo se propuso celebrar el 1 de agosto el amanecer scout. Desde esa fecha nosotros venimos celebrándolo cada año, pero como en nuestra Asociación hay personas que pertenecieron a las Guías de España, decidimos celebrar un año el amanecer y otro el atardecer. Siempre en torno al 1 de agosto, sábado amanecer, viernes atardecer.
Es un momento emotivo pues, aunque creo que la Promesa no hay que renovarla, sino que está siempre presente en la vida del scout y de la guía, nosotros en presencia de los hermanos scouts y guías la volvemos a emitir como recordatorio de aquello que hicimos hace ya bastante tiempo.
Para mi esa fecha del 1 de agosto tiene además un significado especial, pues fue un 1 de agosto de 1976 cundo emití mi Promesa Scout y cuando comrpendí que "scout un día, scout para siempre". Y así, desde aquella fecha trato de cumplirla a diario y recordando especialmente la oración scout que tanto sentido tiene para un scout católico.
Este año, se ha celebrado el Jamscout, el primer campamento nacional del Movimiento Scout Católico (22 al 30 julio). Ya se había celebrado distintos encuentros de carácter nacional, pero nunca con la presencia de todas las ramas. Como miembro de honor del MSC fui invitado a la inauguración. Me moría de ganas de ir y estar presente, pero por una o por otra no pudo ser. De todos modos la familia estuvo presente ya que mi hija Guadalupe que es pionera y mi sobrina Irene que es ruta, ambas del Grupo Scout Ntra. Sra. del Carmen de El Puerto de Santa María, participaron en el mismo.
Además, em alegré mucho ya que en el acto de inauguración, mi hermano scout Elías Py recibió la mayor distinción que concede la Conferencia Internacional Católica de Escultismo, la medalla de la Hermandad de San Jorge. Es para mi una gran satisfacción que haya sido reconocida su labor en el Escultismo católico durante tantos años y responsabilidades. Ahora le deseo lo mejor como Presidente de la Federación de Escultismo de España.
Y por supuesto no debemos olvidarnos de aquello que B.P. nos dijo: "asíos a vuestra Promesa Scout siempre, aunque hayáis dejado de ser muchachos".