Hoy, en correlación con el día del nacimiento de Baden Powell y su esposa Olave, los scouts celebramos el "Día del Pensamiento", un día para reflexionar sobre el Escultismo y sobre nuestra Promesa Scout, que debe ser el alma de nuestra vida.
Buceando por FB he visto en uno de los grupos en que estoy que han publicado la portada de un pequeño librito titulado "Baden Powell" de L. Cánovas. Lo recuerdo perfectamente. Estaba en todas las bibliotecas de patrulla y de grupo y era de lectura obligada. Con él conocíamos al dedillo la vida de Baden Powell y los inicios del Escultismo.
Me pregunto cuántos scouts de hoy en día, de las últimas generaciones, incluidos los responsables, lo han leído. Y es que me da la impresión que hoy en los scouts se lee poco o no se lee. ¿Cuantos habrán leído "Escultismo para muchachos"? Por lo que conozco muy pocos. Todo es la nueva metodología,... y las nuevas técnicas..., pero todo esto no tiene sentido si no conocemos los fundamentos.
- Una promesa y una ley.
- Una educación por la acción.
- Una vida en pequeños grupos.
- Programas progresivos y atrayentes de actividades variadas basadas en los centros de interés de los participantes principalmente en el aire libre y en contacto con la naturaleza.
Conocer la historia del Escultismo es fundamental para saber dónde y en qué momento nos encontramos para luego adaptar los fundamentos a la realidad actual, tal como se nos indicaba en otra pequeña publicación, "El método MSC" de 1975, ya que el escultismo tiene que vivir en un lugar y tiempo determinado.
Comprometámonos en éste "Día del Pensamiento" a leer la vida de Baden Powell y recordar así a ese hombre que tuvo la intuición de aplicar una nueva pedagogía a la educación.